En el mundo de la religión las oraciones son algo así como agarrarse a alguien, una forma de ayudarse en los momentos de dolor, de miedo... Y también lo contrario, con una oración se dan las gracias porque su pequeño hijo ha recuperado la salud.     

Puede ser cierto que las oraciones tienen poderes o no, pero quien ora si tiene poderes que sale del amor, del cariño y, además, de la ciencia. Todo ese conjunto lo consigue todo.

Habrá oraciones menos eficaces. Otras son mejores. Incluso, hay oraciones  y santos que tienen mucho éxito. Me refiero a San Bartolomé.

San Bartolomé tiene la oración más conocida porque es la más bonita. Hasta a las personas excepticas les agrada la oracion de San Bartolomé.

Dice así:

San Bartolomé se levantó

a la hora que el gallo cantó.

Las puertas del Cielo vio de abrir

y a Jesús vio de venir.

- A donde vas Bartolomé.

- Con usted me voy, Señor.

- Detente varón, 

  que te voy a dar un don:

  que donde seas nombrado

  no caiga piedra ni rayo.

  Ni mujer muera de parto

  ni niño de sobresalto.

  Ni labrador en su yunta

  ni pastor con su ganado.

  San Bartolomé bien aventurado

  decídlo cinco veces.

  Preciosa oración

demaribel